Leopoldo Pomés

Mago de las imágenes, la publicidad española puede decir que tuvo la suerte de contar en sus filas con Leopoldo Pomés (1931). Miembro destacado de la pujante intelligentsia barcelonesa de los sesenta y setenta, Pomés se decide por la fotografía tras relacionarse con el grupo Dau al Set (Tápies, Brossa, Cuixart…) e irrumpe con una exposición polémica en las Galerías Layetanas en 1955.

La publicidad lo llama y él decide quedarse, pero sin olvidar nunca sus otros trabajos. Se asocia con otro Leopoldo fundamental, Rodés, para crear Tiempo (1965). Y lo que vino después es imposible resumirlo, aunque una cifra puede dar una idea de su impacto: más de 3.500 spots. Las piezas de gráfica, innumerables. De su poderosa capacidad de generar imágenes nacieron la amazona de Terry o las burbujas Freixenet (1966), marca que llevó muchos años personalmente. De todo su trabajo se montó una gran exposición retrospectiva en 2015, Leopoldo Pomés-Flashback, que pasó por varias ciudades.

De sus trabajos no estrictamente publicitarios destaca la campaña para la candidatura olímpica de Barcelona, incluido su vídeo de presentación, y las ceremonias de apertura del Mundial de Fútbol 1982 en Barcelona. El gran creativo Toni Planells dice de él: «Nos enseñó el auténtico valor de la imagen. Se metía la mano en el bolsillo y sacaba ideas, conceptos y los ponía encima de la mesa y los vendía por encima de cualquier plan de marketing pre establecido».