Lluís Bassat

Creativo, empresario, entrenador de equipos, durante años Lluís Bassat (1941) ha sido el publicitario español más conocido del gran público y en muchos casos, el único. Su experiencia de vendedor de televisores durante sus años de estudiante, más sus estudios, debieron de sumarse a su personalidad para que lograra convencer a David Ogilvy, el gran publicitario inglés, de que él sería su socio ideal en España. Así nació Bassat Ogilvy & Mather.

Su primer gustirrinín publicitario lo logró con la campaña para las hojas de afeitar Filomatic, protagonizada por Miguel Gila. Después vendrían las satisfacciones de ayudar a vender multitud de productos y, sobre todo, el orgullo de colaborar a la construcción de importantes marcas. En este orgullo, también tiene sitio el haber sido una de las personas clave en la creación de las ceremonias de inauguración y clausura de las Olimpiadas de Barcelona 92, o haber sido presidente del jurado del Festival de Cannes, el más prestigioso del mundo.

Enamorado de la creatividad y de las marcas, estas dos frases hablan de su filosofía: «Cualquiera es capaz de tener una gran idea alguna vez. Nosotros hemos de tener una gran idea cada vez». “Las marcas son como las catedrales: se construyen a lo largo de los años, por personas distintas, pero con un objetivo común”.

Doctor Honoris Causa de la Universidad Europea de Madrid, mecenas del arte, patrón de varias funaciones, entre ellas la Fundación José Carreras de lucha contra la leucemia, es autor de cientos de artículos y de dos libros de referencia: El Libro Rojo de la Publicidad, y El Libro Rojo de las Marcas, además de sus particulares Confesiones Personales de un Publicitario.